Espuma y profundidad
En esta ocasión, se realiza la invitación a leer 'Las olas', de la escritora inglesa Virginia Woolf, una de las mujeres más relevantes de la literatura británica y del siglo XX. Los invitamos a revisar su obra más experimental, además de que se deleiten con sus letras y cada descripción que nos evoca las verdaderas sensaciones trascendentales.
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La vida es como un parpadear; una efervescencia en el tiempo y el espacio que dura un día. Nuestra treta a cumplir y ejecutar es la consciencia del tiempo antes de que la ola se regrese al mar y se confunda con el cielo. Precisamente el ser se desvanece, el día, que es la vida, acaba y se olvida, duerme de nuevo. Así, pero un río, terminó el día de Virginia Woolf en 1941, en una inmersión a las profundidades del río Ouse.
El flujo de la consciencia va y viene como en Las Olas, publicada en 1931 por esta controversial inglesa. Estos soliloquios van develando a los individuos, facetas distintas del ser y una presencia común, omnisciente en la vida del mar y el universo. El mar tiene su temperamento y esta experimentación del espíritu en la tierra es una pauta que impulsa a descubrir el ritmo en el que fluimos, estamos y desaparecemos. Los invitamos a nadar en esta obra, o vibrar con las imágenes que evoca esta dama sobre la profundidad de la vida, la cual se choca contra las piedras, hace espuma, brilla como cristal ante el sol y desaparece.
Por Isaac Ponce de Jarama
Septiembre 15, 2014